Miro hacia atrás, recuerdo todo lo que solía ser. Analizo cada instante, cada aprendizaje. Imagino mi vida diferente, adversaria a la de hoy. Quizás hubiese sido lo mismo, no sé, pero me gustaría saber si en esa vida antónima ibas a aparecer.
¿Cómo haces para estar a cada momento en mi cabeza? ¿Que clase de fórmula usaste para meterte tan adentro? Quisiera imaginar que es solo pasajero, pero no, aunque me niegue a aceptarlo.
Se me hace difícil decirte lo que siento. No encuentro las palabras justas que te hagan entender lo que sos, y lo que me haces sentir. cada gesto que hagas me hace pensar que nadie nunca me va a hacer sentir algo tan profundo, tan real.
No pensé que podrías llegar a convertirte en algo así. Sos mi sustento, mi salvación, la esperanza de saber que no me van a dejar caer. Dejo fluir mis sentimientos, ya no hay miedos que atormenten este corazón.
Nada me importa; se que me falta mucho, pero vos con tu sola presencia llenas los espacios vacíos, creando una realidad casi imaginaria. Me saqué la armadura, ya no soy la rígida de antes. Supiste ablandar este corazón, quitándome aquel pensamiento mal formulado, el que decía que en el amor solo existía el fracaso. 
No sé que nos deparará el destino, prefiero dejar que el me sorprenda; solo sé que me encantó que la vida te halla cruzado en mi camino. Me enseñaste mucho, y estoy eternamente agradecida con vos.
Gracias por ser parte de mi vida.